Saint-Étienne-de-Baïgorry: entre caseríos vascos y joyas románicas

El paisaje de viñedos de Saint-Étienne-de-Baïgorry

Saint-Étienne-de-Baïgorry aparece mencionada por primera vez como señorío del Reino de Navarra en el año 1033, cuando es fortificada por orden de Sancho Garcés III de Navarra, durante las Guerras de Religión. En aquella época estaba formada por 11 aldeas: Donostei (Saint-Étienne), Leizparze (Leispars), Urdoze (Urdos), Okoze (Occos), Otikorene (Oticoren), Germieta (Guermiette), Irulegi (Irouléguy), Sorhoeta (Sorhouette), Lasa (Lasse), Anhauze (Anhaux) y Azkarate (Ascarat). Las 6 primeras villas formarían después de la Revolución Francesa de 1789 la comuna de Saint-Étienne-de-Baïgorry que sus habitantes llamarán simplemente “Baigorri”.

En la calle Gaineko Karrika encontrarás hermosas casas vascas

Cada barrio de Saint-Étienne-de-Baïgorry ha conservado sus propias particularidades, desde la capilla de Okoze que luce un retablo del siglo XVIII y estatuas de madera tallada que datan de los siglos XVII y XVIII, hasta el frontón y lavadero de 1789 de Germieta, pasando por los caseríos o “etxe” de los siglos XVII y XVIII de Donostei, que verás que han conservado sobre el dintel de la puerta, la fecha de su construcción tallado en la madera o la piedra.

Qué ver en Saint-Étienne-de-Baïgorry

Edificio de Correos de Saint-Étienne-de-Baïgorry

Sólo por entrar en la iglesia de Saint-Étienne-de-Baïgorry y dormir en el encantador Hôtel Arcé ya vale la pena recorrer los 55 km que separan esta pequeña población, de Bayonne, a la que dedicamos el artículo anterior y donde recomiendo hacer una ruta a pie por el barrio más antiguo de la ciudad, conocido con el nombre de Grand Bayonne y que es el corazón de la ciudad medieval. Un buen momento para visitar Saint-Étienne-de-Baïgorry es el primer sábado de mes, cuando celebran por la mañana su mercado de productos locales.

Behereko Plaza

En el Ayuntamiento encontrarás la Oficina de Turismo de Saint-Étienne-de-Baïgorry

La Oficina de Turismo de Saint-Étienne-de-Baïgorry y el Ayuntamiento se encuentran en la Behereko Plaza. Desde aquí parte la Ballade découverte du bourg; un bonito paseo para descubrir este pueblo encantador del País Vasco Francés y que recorre las calles de Donostei. Otro de los lugares que no te debes perder es la mesa de orientación situada cerca de Oronozalde, en dirección a Okoze Germieta, donde se pueden descubrir los viñedos de Irouléguy. Las viñas se encuentran distribuidas en terrazas que cubren las faldas montañosas que protegen a la vid de los fríos vientos del norte.

Pont Romain de Saint-Étienne-de-Baïgorry

Lo primero que llama nuestra atención es un puente que llaman “romano”, pero que fue construido en 1661. Durante mucho tiempo el Pont Romain de Saint-Étienne-de-Baïgorry fue la principal vía de paso que cruzaba el Nive (¿te acuerdas del afluente vasco que vimos en Bayonne?). Al verlo, comprenderás por qué lo llaman romano, sus piedras, su singular arco de medio punto y las marcas de las ruedas de las carretas que durante siglos surcaron su pavimento, son una muestra de su larga historia.

Église Saint-Étienne

Diferentes estructuras de diferentes épocas conviven en la Iglesia de Saint-Étienne

La Iglesia de Saint-Étienne aparece mencionada por primera vez en 1236, formando parte del Monasterio de Roncesvalles en Navarra. Aunque su construcción, en estilo románico-bizantino, se calcula alrededor del siglo XI. En su interior descubrirás 3 pisos de galerías, típicas de las iglesias vascas, que fueron construidas entre el siglo XVI y XVIII y que la convierten en una de las iglesias más bonitas que he visto en mi viaje al País Vasco Francés.

Retablo Mayor de la Iglesia de Saint-Étienne-de-Baïgorry

Varias piezas destacan en su patrimonio arquitectónico como unas columnas románicas del siglo XII (a la altura de la segunda capilla), el campanario levantado entre 1790 y 1793 y restos que recuerdan que también fue una iglesia fortificada como su torre con tejado cónico. No te pierdas la capilla gótica de los vizcondes de Baigorri con sus capiteles tallados (es la segunda capilla que se encuentra entrando a la izquierda).

Las galerías de madera son típicas de las iglesias vascas

El retablo barroco de Saint-Étienne fue realizado entre 1707 y 1710 y puede verse en la imagen central, representado el martirio de San Esteban. A la derecha puede verse a San José con el Niño Jesús que sostiene unos lirios y a la izquierda se encuentra la Virgen María y el Niño Jesús sosteniendo un rosario. Otra de las joyas destacadas de la Iglesia de Saint-Étienne es su órgano, fabricado en 1999 por Rémy Malher inspirándose en los órganos barrocos del siglo XVIII de Alsacia. Está realizado con madera de abeto y decorado con policromía y profusión de dorados, además es el protagonista en el mes de agosto del Festival Musical de Basse-Navarre.

Château d’Etxauz

El Castillo d’Etxauz fue la residencia de los vizcondes de Baigorri. Fotografía de Ángel Bigorra 

El Castillo d’Etxauz fue la residencia de los vizcondes de Baigorri durante 8 siglos, entre 1033 y 1832. Su nombre hace referencia al apellido de una familia navarra del siglo XIV vinculada a los reyes de Navarra. Las partes más antiguas conservadas del Castillo d’Etxauz corresponden al siglo XII, aunque la mayoría pertenecen a una ampliación realizada en 1555. El interior, al que no hemos podido acceder, corresponden a la reforma realizada en el siglo XVII. Destacan sus dos pequeñas torres de vigilancia (una redonda y otra poligonal), dos torres redondas con tejado cónico que flanquean cada uno de sus extremos. Como dato curioso nos enteramos que Charlie Chaplin, se alojó 3 veces en el Castillo d’Etxauz en 1925, 1926 y 1931.

Dónde dormir en Saint-Étienne-de-Baïgorry

El Hôtel Restaurant Arcé se encuentra a orillas del Nive

Si buscas alojamiento en Saint-Étienne-de-Baïgorry te recomiendo dormir en el Hôtel Restaurant Arcé**** donde pudimos degustar, además, algunos de los productos más famosos de la región como los vinos de Irouléguy, los quesos de oveja de la AOC Ossau-Iraty, sus embutidos de cerdo vasco y el famoso gateaux basque. El Hôtel Arcé se encuentra a orillas del Nive, en una auténtica casa vasca rodeada de jardines y que la han regentado desde 1864, 5 generaciones de la misma familia.

Habitación del Hôtel Arcé

Aquel primer establecimiento “Au bon vin du Pays” era un modesto café que con el tiempo se convirtió en hospedaje para peregrinos y comerciantes. No hay que olvidar que nos encontramos a 11 km de Saint-Jean-Pied-de-Port, etapa obligada del Camino de Santiago. El ambiente calmado que se respira aquí y el lugar donde está ubicado, rodeado de naturaleza, transfieren una calma adictiva de la que no te gustaría escapar jamás. Varios senderos invitan a recorrer los alrededores, ya sea a pie, en bicicleta o a caballo. Puedes descubrir el paisaje del Valle de Aldudes, el Sendero de los Contrabandistas o realizar una escapada gastronómica llamada “La Montagne des Gourmets” recorriendo varias granjas y conociendo productores locales.

Las habitaciones de la planta baja disponen de terraza privada

El Hôtel Arcé es un hotel familiar, pero también es un remanso de paz en Saint-Étienne-de-Baïgorry, rodeado de montañas y pastos, transmite familiaridad desde el primer momento que pones un pie en el alojamiento. Los muebles antiguos, objetos y cuadros de Pablo Elizaga que decoran sus 20 habitaciones tienen una historia que contar, como sus dueños. No tardarás en darte cuenta que te encuentras en un sitio excepcional y que eres el huésped de un antiguo trinquete (un frontón de pelota vasca). Las cenas y desayunos en época estival se realizan en una terraza, junto al murmullo del agua que baja saltando las piedras del río y bajo la sombra de plataneros centenarios.

En el restaurante del Hôtel Arcé disfrutarás de la gastronomía local

Al restaurante del Hôtel Arcé se puede acceder, aunque no estés alojado en el hotel. Aquí te esperan recetas del Chef Pascal Arcé procedentes de un patrimonio culinario heredado de los abuelos. A base de productos del terruño y productores locales como los embutidos y el jamón de Kintoa AOP de Pierre Oteiza, el pimiento de Espelette, las truchas de Ispéguy en Baigorri, los quesos de oveja de la Granja Luisenea, el pan de la Panaderia Etchemendy de Ossès o las setas de sus bosques.

Más información: Hôtel Restaurant Arcé. Dirección: Route du Col d'Ispéguy. 64430 Saint-Étienne-de-Baïgorry. Web: Hôtel Restaurant Arcé.

A 35 kilómetros de Saint-Étienne-de-Baïgorry se encuentra la encantadora población de Espelette.

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Ruta a pie por el barrio más antiguo de Bayonne

Imprescindible descubrir las casas en el Quai Augustin Chaho

Bayonne, Bayona o Baiona (que significa “buen río” en euskera), 3 nombres que recuerdan la esencia francesa, española y vasca de la que está considerada la Puerta al País Vasco Francés y la ciudad más monumental de la región. Permíteme utilizar indistintamente los 3 nombres de Bayonne, Bayona o Baiona a lo largo de esta ruta por el barrio más antiguo de Bayonne. Esta joya del País Vasco francés, capital administrativa, cultural y económica del País Vasco Francés, se encuentra situada a ½ hora en coche de España y a 10 minutos de Biarritz y de la costa.

Fachadas del Quai Galuperie reflejadas en las aguas del Nive

Asentada a 6 km del Océano Atlántico, en la confluencia del río Adour (gascón) y el afluente Nive (vasco), Bayonne tiene una belleza especial que se refleja en sus aguas. Un conjunto de bellas mansiones se extiende en sus riveras y en el interior de la ciudad fortificada. El agua y una serie de puentes que facilitan el deambular por sus muelles y terrazas, hacen de frontera natural separando sus 3 barrios: la Ciudad Alta o Grand Bayonne en torno a la catedral, la Ciudad Baja o Petit Bayonne y el Arrabal o Saint Esprit; el barrio judío más antiguo de Francia.

Ruta a pie por el barrio más antiguo de Bayonne

En la Plachotte se encuentra uno de los restos romanos de Bayonne

Bayonne ha estado fortificada desde siempre, primero cuando los romanos instalaron un campamento militar en el siglo I y le llamaron Lapurdum nombre que perduraría hasta el final del siglo XI cuando pasó a llamarse Baiona. Las murallas jalonadas de torres, la rue des Augustins y la Tour Romaine de La Plachotte, concentran parte de la esencia de aquel primer castrum romano que se convirtió en plaza fuerte del ducado de Vasconia y pasó a ser de la corona inglesa en la Baja Edad Media. Dejamos el coche en el aparcamiento situado frente a la Oficina de Turismo de Bayona situada en el número 25 Place des Basques. Una aplicación gratuita facilita el estacionamiento pudiendo pagar a distancia sin regresar al coche y sin interrumpir ninguna visita e incluso te avisa cuando está a punto de acabarse el tiempo. Se llama PayByPhone y puedes calcular unos 2 € por hora de estacionamiento.

Red de fortificaciones del Grand Bayonne

Algunos paños de la muralla de Bayona miden 3 metros de espesor

Iniciamos nuestro recorrido por el barrio más antiguo de Bayona, situado en la orilla occidental del Nive, llamado el Grand Bayonne, corazón de la ciudad medieval. Aquí se encuentran algunas de las visitas imprescindibles de Bayonne: las fortificaciones, la Catedral y el Château-Vieux o Castillo Viejo. Este destacado núcleo medieval ha conservado una red de fortificaciones con 3 murallas concéntricas diferentes. 

El Parc de la Poterne es un lugar para disfrutar de los espacios verdes

Construidas sucesivamente durante siglos, primero en época romana, después en el siglo XVI y finalmente las levantadas por el mejor ingeniero militar de la época Sébastien Le Prestre, Señor de Vauban (1633-1707) en el siglo XVII. Atravesamos La Poterne una de las puertas abiertas en la muralla en el siglo XIX, dejando atrás un bello parque ajardinado, un parque infantil y el Jardín Botánico de Bayona.

Centro de Interpretación

Montaje fotográfico. Rue Poissonnerie en el siglo XIX y en la actualidad

Al otro lado, en el 7 Rue des Gouverneurs, se encuentra el Centro de Interpretación de la arquitectura y del patrimonio de Bayona, la entrada es gratuita. Abierto en julio de 2021, es el lugar ideal para descubrir el patrimonio, la arquitectura y la historia de Bayona de una forma didáctica e interactiva. En el exterior de Lapurdum, Centre d’Interprétation de l’Architecture et du Patrimoine de Bayonne podrás ver una serie de imágenes que combinan escenas del pasado en contraste con escenas actuales de Bayonne. 

Bodega subterránea bajo el Centro de Interpretación

En el interior, te espera un magnífico ejemplo del patrimonio excepcional de Bayona, una bodega subterránea de las 138 catalogadas hasta la fecha y de las 6 declaradas Monumento Histórico de la ciudad. Algunas de estas bodegas, conocidas con el nombre de Sostarrainhs, se construyeron en la Edad Media y se extienden por el subsuelo de la parte alta de la ciudad, alrededor de la catedral y en las calles que descienden hasta el río. Situadas bajo las viviendas, estos espacios eran utilizados para conservar alimentos, como almacenes o también como tabernas.

Cathédrale Sainte-Marie

Las dos torres de la Catedral son visibles desde varios puntos de la ciudad

Continuamos hasta llegar a la Place Monseigneur Vansteenberghe donde se alza majestuosa la Cathédrale Sainte-Marie (Catedral de Santa María). Este templo gótico construido a partir del año 1258, sobre los restos incendiados de una primera catedral románica, domina el horizonte de la ciudad con sus dos impresionantes agujas que señalan el cielo. 

La catedral de Bayona tiene muchas capillas; siete en el deambulatorio

En su interior destacan las capillas luminosas y decoradas del deambulatorio y sus magníficas vidrieras. Es también una de las etapas del Camino de Santiago y por ese motivo está incluida en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. La catedral de Bayona es uno de los enclaves que visita Jake Barnes, el protagonista de la novela The Sun Also Rises (Fiesta), escrita por Ernest Hemingway, en la ciudad.

Claustro de la catedral

Las galerías del claustro conservan varias tumbas y losas funerarias

Una puerta ubicada en la Place Pasteur sirve de acceso al claustro de la catedral de Bayona. Construido entre los siglos XIII y XIV en estilo gótico flamígero, es uno de los claustros más amplios de Francia. Utilizado desde sus inicios como lugar de oración, como plaza pública para las reuniones del ayuntamiento y los ciudadanos, hoy sirve también de espacio expositivo. Algunas losas funerarias y panteones en sus muros, recuerdan que este espacio fue utilizado también como cementerio. La entrada a la catedral y al claustro es gratuita.

Place Pasteur

En la Place Pasteur tenían lugar las ejecuciones públicas en la Edad Media

Las calles alrededor de la catedral recuerdan los oficios y talleres que ocupaban estas vías en la Edad Media. Desde el siglo XII las herrerías de la Rue des Faures forjaban el hierro para la fabricación de armas y los talleres estuvieron funcionando hasta el siglo XIX. ¡Aquí se inventó la bayoneta! En la Rue Sabaterie se instalaron los zapateros y en la Rue Vieille-Boucherie los charcuteros.

Hôtel de Ville de Bayonne

El Hôtel de Ville de Bayonne es el punto central de las fiestas de Bayona

El Ayuntamiento de Bayona y el Théâtre Michel-Portal; el Teatro Municipal de Bayona, ocupan un mismo edificio de la Place de la Liberté. Fue construido en 1842 por el arquitecto Nicolas Vionnois, destaca en la cornisa las esculturas dedicadas a las principales actividades económicas y artísticas de la ciudad. De izquierda a derecha: la Navegación, Industria, Arte, Comercio, Astronomía y Agricultura.

Musée Basque et de l’Histoire de Bayonne

El Museo Vasco se encuentra en un edificio portuario del siglo XVII

En el 37, Quai des Corsaires se encuentra el Musée Basque et de l’Histoire de Bayonne fundado en 1922. El Museo Vasco muestra la historia de Bayona a través de 2.000 objetos y obras de arte. Es el museo etnográfico más grande del País Vasco y se exhiben elementos de los usos, costumbres y tradiciones de las culturas vascas, gasconas y hebrea.

Halles de Bayonne

En el mercado de Bayona encontrarás productos locales artesanales

En el Quai du Commandant Roquebert se encuentra el edificio del mercado: Halles de Bayonne. El Mercado de Bayona está abierto todos los días por la mañana y también es posible disfrutar de una pausa en alguna de las mesas instaladas a su alrededor. El edificio de hierro y cristal fue reconstruido a finales del siglo XX a imagen del edificio original estilo Baltard del siglo XIX. Si te gusta disfrutar de los mercados, todos los jueves en la Place des Gascons tiene lugar un mercado semanal al aire libre donde productores y artesanos venden desde pescado, frutas y verduras, hasta ropa, bisutería y complementos. Todos los viernes en la Esplanade Roland Barthes se instala el Mercado de Pulgas con antigüedades y cazadores en busca de tesoros.

Maison Moulis

La Maison Moulis se encuentra junto al Pont Pannecau

Junto al Mercado de Bayona se encuentra una monumental vivienda llamada La Maison Moulis; bello ejemplo de la arquitectura tradicional vasca del Renacimiento. Su fachada en piedra luce ventanales del siglo XVI y entramados de madera pintada del color rojo “sang de boeuf” (sangre de res) tradicional y restaurados en el siglo XIX.

A orillas de la Nive

Vista del Quai Galuperie

El casco antiguo de Bayonne es ideal para pasear, las pequeñas calles laterales de la Rue d’Espagne te transportan rápidamente a la Edad Media y los muelles ribereños de la Nive, con sus típicas casas de entramado de madera, a un precioso cuento de los hermanos Grimm. 

Montaje fotográfico. Antigua imagen del Muelle de Lesseps y en la actualidad

Bayona conocería la prosperidad comercial bajo dominio inglés, entre el siglo XII y XV, gracias a su puerto fluvial (uno de los más importantes del Ducado de Aquitania), pero también al matrimonio en 1152, de Henry Plantagenet (Enrique II de Inglaterra) con Aliénor d’Aquitaine (Leonor de Aquitania) cuya historia también está vinculada fuertemente a Poitiers y Burdeos. Convertido en la principal salida al mar del Reino de Navarra, el puerto de Bayona conectaría con los puertos de Inglaterra, Flandes y los puertos vascos de Bizkaia y Gipuzkoa, dominando el comercio marítimo durante siglos.

Comercios y productos típicos de Bayonne

Jambon de Bayonne en el Restaurant Le Carré

En nuestra ruta a pie por el barrio más antiguo de Bayonne es imprescindible descubrir los comercios donde se vende el famoso Jambon de Bayonne IGP (Indicación Geográfica Protegida). El Jamón de Bayona se come en lonchas finas y casi transparentes, aunque hay quien lo fríe en lonchas más gruesas y lo acompaña con una buena piperrada (salsa con pimiento, cebolla y tomate). Una leyenda explica que, en el siglo XIV, Gaston Phoebus disparó a un jabalí que cayó muerto en un manantial de agua salada en Salies. Al año siguiente, el jabalí fue encontrado por unos cazadores en buen estado de conservación y así nació el Jamón de Bayona. Desde 1426 se celebra en Bayona cada año la Feria del Jamón donde los productores exhiben sus jamones elaborados artesanalmente y ofrecen degustaciones. También se realiza el concurso al Mejor Jamón Casero al ritmo de la música del Pig Festival Jazz.

Elaboración artesanal de chocolate en Atelier du Chocolat

De fama internacional también es el chocolate de Bayona, considerado el mejor chocolate de Francia. Bayonne es además la primera villa chocolatera de Francia, con 7 chocolaterías de referencia. Visitamos una de ellas, el Atelier du Chocolat, situado en la 7 Allée de Gibéléau, y donde se puede descubrir la auténtica labor de los chocolateros en los talleres que se organizan diariamente. La tradición del chocolate en Bayona se inicia a consecuencia de la expulsión ordenada por los Reyes Católicos de los judíos que fueron perseguidos por la Inquisición y que tuvieron que huir de España y Portugal. 

Variedad de chocolate a la venta en el Atelier du Chocolat

Aquellos refugiados judíos se asentaron en el barrio de Saint Esprit de Bayonne, introduciendo la receta de fabricación del chocolate. En el siglo XVII se desarrolló una industria artesanal en torno al cacao llegado de América que ha perdurado hasta nuestros días. Esta destreza chocolatera pervive en el Atelier du Chocolat abierto en 1951 por Joseph y Madeleine Andrieu y cuya nieta Nelly regenta en la actualidad el establecimiento familiar y los secretos de fabricación. En otoño, Bayona celebra unas jornadas en torno al chocolate llamadas "Bayonne fête son chocolat" con visitas a los talleres, degustaciones y animaciones en la calle.

Las calles más comerciales de Grand Bayonne en la Place des 5 Cantons

En ese deambular sin prisa que toda ciudad merece, encontrarás balcones y aldabas en hierro forjado, blancas fachadas con entramados de madera pintada y escenarios que forman parte de la novela The Sun Also Rises (Fiesta) escrita por Ernest Hemingway. En la Rue du Port Neuf donde se encontraba el Hotel Manas Panier Fleuri, donde el protagonista se hospeda en su paso por Bayona. No es de extrañar que, en 2011, Bayonne se convirtiera en “Ville d’Art et d’histoire” (Ciudad de Arte e Historia), reconocimiento que otorga el Ministerio de Cultura, gracias a su patrimonio histórico y cultural de casi 2.000 años de antigüedad.

Château-Vieux

El Château-Vieux se alza sobre el asentamiento romano de Lapurdum

Acabamos nuestra ruta a pie por el barrio más antiguo de Bayonne en el Château-Vieux o Castillo Viejo. Situado en la Rue des Gouverneurs, fue construido a finales del siglo XI sobre los restos del antiguo castro romano por orden de los Vizcondes del Labourd. Esta enorme fortaleza medieval ubicada en el centro de Bayonne es en la actualidad propiedad del ejército francés. Ocupado por el Primer Regimiento de Paracaidistas de Infantería de Marina de Francia, sólo puede visitarse con guías de la Oficina de Turismo de Bayona.

Dónde comer en Bayonne

Salmón Label Rouge con puré de calabacín al limón y selección de tomates del Restaurant Le Carré

Restaurant Le Carré es un establecimiento diseñado por el arquitecto Jean-Philippe Nuel, situado en el barrio histórico de Petit Bayonne donde se pueden degustar unas tapas o pinchos en su barra o bien disfrutar en su restaurante o terraza de un menú de mercado con productos frescos y locales del que podemos conocer su origen y los productores de cada ingrediente. El Chef Charles Cez y su equipo preparan diariamente una selección de entrantes, primeros platos y café por 24 € o incluyendo postre en la Formule por 29 €.

Más información: Restaurant Le Carré. Dirección: 9, Rue Frédéric Bastiat, 64100 Bayonne. Teléfono + 33 (0) 559 858 599. Horario: de lunes a domingo de 7 a 22 h. Web: Restaurant Le Carré.

Dónde dormir en Bayonne

Habitación del Hôtel Villa Koegui

El Hôtel Villa Koegui **** ofrece una experiencia única de alojamiento inspirado en la cultura y la historia del País Vasco. Situado en una calle tranquila del barrio histórico de Petit Bayonne. Abrió sus puertas en marzo de 2020 y sus 43 habitaciones y suites del hotel han sido decoradas con hermosas pinturas del artista bayonés Léon Bonnat.

Más información: Hôtel Villa Koegui. Dirección: 9, Rue Frédéric Bastiat, 64100 Bayonne. Teléfono + 33 (0) 559 858 598. Web: Hôtel Villa Koegui.

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Ruta modernista e histórica por el Barrio de Vegueta de Las Palmas de Gran Canaria

En el Barrio de Vegueta encontramos varios edificios modernistas

Iniciamos nuestra ruta modernista e histórica por el Barrio de Vegueta de Las Palmas de Gran Canaria, dejando tras nosotros el Barrio de Triana del que tienes una ruta modernista en el artículo anterior y la Plaza Hurtado de Mendoza. Justo enfrente encontramos en la Calle Juan de Quesada 1 esquina Calle Obispo Codina 5, un edificio modernista construido en 1905 por el arquitecto Fernando Navarro. Destacan la multitud de ventanas decoradas en sus 3 plantas de viviendas, con formas florales típicas del Art Nouveau.

Mercado de Vegueta. Calle Juan de Quesada

Frutería de Jose y Alicia. ¡Mira el tamaño de la seta y de los tomates!

Sin dejar la calle que durante años sirvió de frontera natural de los dos barrios más emblemáticos de Las Palmas de Gran Canaria, llegamos al Mercado de Vegueta. Un lugar extraordinario para reponer fuerzas e impregnarse de la variedad de frutas y verduras que crecen en esta tierra generosa cercana a parecerse a un vergel del paraíso. Acércate hasta la parada 33 de Jose y Alicia, es todo un espectáculo para los sentidos, podrás comprobar que hay muchas frutas que no has probado, ni visto en ningún otro lugar.

Calle Obispo Codina

En la Calle Obispo Codina se encuentra el muro que cierra el jardín del Palacio Episcopal

Nos encontramos en el Barrio de Vegueta, el casco histórico de Las Palmas de Gran Canaria y uno de los barrios indispensables que deben visitarse en la ciudad. Sus joyas arquitectónicas comparten protagonismo con los hechos históricos más importantes de la isla ocurridos entre sus calles y plazas.

Ermita de San Antonio Abad. Plaza de San Antonio Abad

En la Plaza de San Antonio Abad se fundó Las Palmas de Gran Canaria

En el espacio que ocupa hoy la Ermita de San Antonio Abad, estableció Juan Rejón el primer campamento fortificado de las tropas castellanas. El primer asentamiento que daría origen a la ciudad actual fue fundado un 24 de junio de 1478, con el nombre de Real de las Tres Palmas (nombre inspirado por la abundante cantidad de palmeras que había en el lugar). Aquel hecho histórico se recuerda en este lugar con una placa y 3 palmeras. La Ermita de San Antonio Abad data del siglo XV y fue el primer templo parroquial levantado en la isla. De su primer edificio conserva el escudo de la Casa de Austria y la portada de sillería, el resto corresponde a reconstrucciones y reformas llevadas a cabo entre 1757 y 1777. Se dice que fue aquí donde Cristóbal Colón rezó antes de partir a América y una placa conmemora el hecho. En su interior, se conserva un hermoso retablo barroco.

Casa de Colón. Plaza del Pilar Nuevo

La Portada Verde de la Casa Museo de Colón fue realizada con piedra de Tirma

Si quieres ver la fachada trasera de la catedral y una de las portadas de la Casa de Colón elaborada en piedra de color verde debes ir hasta la Plaza del Pilar Nuevo. Desde aquí parten estrechas calles para perderse sin rumbo como el Pasaje Pedro de Algabalay, el Pasaje de La Audiencia y la Calle Montesdeoca.

La portada de la Calle Herrerría fue realizada con piedra amarilla de Teror

La Casa Museo de Colón se encuentra en el interior de varios edificios que como en un gran puzle han ido encajando las piezas a pesar de sus distintas procedencias. Uno de los edificios corresponde a una casa del siglo XV de estilo isabelino que mezcla la arquitectura tradicional canaria, pero conservando una portada gótica de cantería. Otro de los edificios es una casa gótica con una portada del siglo XVI que convive con la que fuera la casa natal del tenor Alfredo Kraus y que ha conservado una fachada decorada en gótico flamígero.

Las ánforas, el crucifijo y el Porta Ánimas son objetos originales

En 1952, la que fuera la antigua Casa de los Gobernadores y donde se afirma que estuvo alojado Cristóbal Colón en 1492 antes de realizar su viaje a las Américas, abrió sus puertas como museo. En el interior de la Casa Museo de Colón se exponen pinturas de los siglos XVI al XIX, la Colección de Cultura Esmeraldeña formada por restos de yacimientos ecuatorianos, aztecas y mayas, así como mapas, maquetas y objetos del navegante Cristóbal Colón junto a la recreación del camarote del Almirante en la carabela La Niña.

Plaza de Santa Ana

Los famosos perros de la Plaza de Santa Ana fueron bautizados con el nombre de Aterura, Mogano, Doramas, Tindaya, Bentayga, Tenoya y Tirajano

Nos acercamos hasta la cercana Plaza de Santa Ana construida en el siglo XVI con trazado renacentista. Fue la primera Plaza Mayor proyectada de España. Su diseño de planta rectangular se exportaría a toda la América Colonial. Aquí se concentran los edificios más emblemáticos de Las Palmas de Gran Canaria como son: la catedral, la Casa Consistorial, el Palacio Regental, el Archivo Histórico Provincial y el Obispado de Canarias. Un extenso catálogo de estilos que abarcan desde el gótico tardío y renacentista, hasta el neoclásico y el modernismo.

Catedral de Santa Ana

La Catedral de Santa Ana preside la Plaza de Santa Ana

La Catedral de Santa Ana empezó a construirse en el año 1500, de esta primera etapa que finalizó en 1570, pertenece el cuerpo de la nave de estilo gótico donde destaca el Altar Mayor de 1518. A mediados del siglo XVIII se inicia una segunda etapa constructiva que dota a la fachada que vemos hoy de su estilo neoclásico. Las pocas piezas originales que no han sido saqueadas por el tiempo y los corsarios son: un arca rococó del siglo XVIII y una gran lámpara de plata de 1678. En la primera capilla de la izquierda se encuentra la tumba del poeta barroco Bartolomé Cairasco de Figueroa. En la Capilla de San Jerónimo se conserva un órgano barroco, en la Capilla de San Gregorio se exhiben dos pinturas de Santa Ana y San Joaquín que formaban parte de un tríptico flamenco de 1602. 

El interior de la Catedral de Santa Ana recuerda un palmeral

En las Capillas de Nuestra Señora de la Antigua, de San José y de Santa Teresa pueden verse esculturas del maestro Luján Pérez. Se recomienda acceder al mirador de la torre sur desde donde se obtienen unas magníficas vistas de Las Palmas de Gran Canaria. En uno de los laterales de la catedral se esconde una de las joyas arquitectónicas de Las Palmas de Gran Canaria: el Patio de los Naranjos. Basta con atravesar la Puerta del Aire construida en el siglo XVI en estilo renacentista con piedra de sillería para acceder al que fue el Patio de la Inquisición. El patio construido en el siglo XVII es representativo del estilo tradicional canario y fue testigo de un buen número de ejecuciones, aunque su importancia actual radica en la gran balconada de madera; un magnífico ejemplo del arte canario.

Casas Consistoriales

Las Casas Consistoriales pueden visitarse todos los domingos gratuitamente

Justo enfrente de la Catedral, al otro lado de la Plaza de Santa Ana, se encuentran las Casas Consistoriales de Las Palmas de Gran Canaria. El edificio fue construido entre 1842 y 1855 en estilo neoclásico sobre los restos de un ayuntamiento anterior que quedó arrasado por un incendio. Parece ser que aquí estuvo ubicado el Tribunal de la Inquisición que estuvo en funcionamiento desde 1505 hasta 1834. Destaca la fachada en piedra de cantería y sus 9 arcos rematados por amplios ventanales y una gran balaustrada.

El Obispado de Canarias data del siglo XV

El modernismo canario se desarrolló entre 1860 y 1936 y fue en ese periodo cuando el arquitecto Fernando Navarro construyó en 1899 el edificio residencial situado en la Plaza de Santa Ana 2. En época modernista, concretamente en el año 1920 le tocaría el turno a la reforma del Palacio Episcopal que podemos verlo situado justo enfrente del anterior, en el número 12 de esta misma plaza. Del edificio original construido en el siglo XVI conserva una portada de sillería.

Edificio modernista de Fernando Navarro en la Plaza de Santa Ana

Pero el edificio modernista que llama mi atención es el situado en la Plaza de Santa Ana 5. Está considerado el mejor edificio modernista de Fernando Navarro construido en Las Palmas de Gran Canaria y no es para menos. Su fachada combina elementos que recuerdan el estilo gótico con elementos característicos del Art Nouveau como son las ventanas y los elementos ornamentales vegetales realizados con cantería local.

Plaza del Espíritu Santo

La Fuente Monumental del Espíritu Santo fue inaugurada el día del Corpus de 1869

Abandonando la Plaza de Santa Ana y dejando a nuestra espalda la catedral, nos acercamos al siguiente rincón del Barrio de Vegueta de Las Palmas de Gran Canaria. En el centro de la Plaza del Espíritu Santo se alza una fuente cubierta con un monumental templete y un pilar del siglo XIX de estilo neoclásico obra de Manuel Ponce de León. Alrededor de esta plaza pueden verse un buen número de antiguas casas y mansiones señoriales que concentran la esencia del Barrio de Vegueta.

Museo Canario. Calle del Dr. Verneau

En el Museo Canario pueden verse las prácticas funerarias de la población aborigen

Muy cerca, en la Calle del Doctor Vernau 2, Laureano Arroyo junto a Francisco de la Torre se encargan en 1890 de una parte de lo que hoy es sede del Museo Canario. Está considerado el museo más antiguo de Canarias, fundado en 1879 para conservar todo lo relacionado con la cultura aborigen. Su interior expositivo abarca un periodo desde mil años antes de Cristo hasta la colonización castellana en el siglo XV. La exposición permanente muestra cómo vivían, la actividad económica y los ritos funerarios de los aborígenes. Entre las piezas que se exhiben se encuentran momias envueltas en sudarios realizados con capas de cuero y esteras de junco, vasijas extremadamente finas con decoración pintada y objetos cotidianos de la cultura aborigen.

Puedes seguir leyendo sobre el legado aborigen de Gran Canaria en mi artículo: Gran Canaria arqueológica: tras los pasos de los aborígenes canarios.

Plaza de Santo Domingo

La Plaza de Santo Domingo es un remanso de paz en el bullicioso Barrio de Vegueta

Finalmente, nuestra ruta modernista e histórica por el Barrio de Vegueta de Las Palmas de Gran Canaria acaba en el centro de la Plaza de Santo Domingo donde se alza una fuente de piedra del siglo XVIII rodeada de casonas nobles canarias. Aquí se encuentra la Iglesia de Santo Domingo construida en el siglo XVII-XVIII donde destaca una atractiva fachada con un pórtico de influencias americanas. En su interior pueden verse las esculturas de Santo Tomás de Aquino y La Verónica, obra del maestro Luján Pérez.

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