Soy una enamorada de la época modernista, siempre que puedo me escapo a descubrir el rico patrimonio que aún se conserva en Cataluña de una época que buscaba su inspiración en la naturaleza.
La Garriga se encuentra
situada a 40 Km. de Barcelona y descubrirla es como abrir un cofre
del tesoro. En sus calles se conserva la obra modernista de un gran
arquitecto: Manuel Joaquín Raspall
i Mayol (1877-1937) y la forma de
vida de los veraneantes de principios del siglo XX, que se hicieron
construir villas de veraneo con frondosos jardines para disfrutar del
aire libre. Este fenómeno social fue protagonizado por la alta
burguesía catalana y Raspall fue el artífice de muchas de
estas torres de veraneo que se edificaron en el Vallés Oriental.
La proximidad de
Barcelona, su beneficioso clima, el ambiente rural y agrario que se
respiraba y la necesidad terapéutica de cualquier viaje, atrajeron a
una colonia de veraneantes que pronto demandó todo tipo de servicios
como: fondas, balnearios o establecimientos comerciales que acabaron
desarrollando las poblaciones de alrededor.
Convertido en arquitecto
municipal, Raspall llegó a firmar 760 proyectos, de los que
actualmente por desgracia sólo se conservan un 40%. Actualmente
algunas de estas joyas modernistas han sido declaradas Bien
cultural de interés nacional, y es que ciertamente lo valen.
La ruta que os
propongo abarca obras de otros arquitectos modernistas que
embellecieron con su obra la población de La Garriga. El itinerario
descrito abarca principalmente tres calles que discurren en paralelo:
Carrer dels Banys, Carrer
de Josep Sancho Marraco
y El Passeig; donde se concentran la mayoría de
las casas de veraneo.
En el Carrer
dels Banys podemos encontrar cinco hermosos
ejemplos de arquitectura modernista, todas ellas obras del arquitecto
Raspall. Es una calle muy recomendable donde es posible
encontrar desde la casa materna del artista hasta una tienda de la
época aún en uso. Los edificios que no os debéis perder son los de
los situados en los números 34, 38, 39, 40 y 44: Casa-tienda
Josep Reig i Argelagós,
Can Raspall, Casa Mercè
Mayol, Casa Ramona Sallent
i Freixa y finalmente Casa Lluís
Ambrós i Martí.
En El Passeig
se concentran diez de las obras más exquisitas de este arquitecto
modernista. Caminar por este paseo es una forma extraordinaria de
conocer la obra de este artista y la manera más agradable de ver las
viviendas unifamiliares de tipo jardín de principios del siglo XX.
Fueron construidas entre 1910 y 1913 y merecen ser admiradas
detenidamente, ya que todas ellas guardan joyas decorativas. Algunas
de ellas son: Torre Iris, La
Bombonera, Casa Juli Barbey
i Poinsard, Casa Antoni
Barraquer i de Ros,
Casa Fèlix Fages i
Vila, Casa Llorens, Casa
Esteve Roqué, Casa Joan
Colom i Capdevila y la Casa
Paulí Puig i Gol.
En la intersección con
la Calle de Cast Oliver
giraremos a mano derecha para completar nuestro recorrido en la Calle
de Josep Sancho Marraco
donde encontraremos las viviendas gemelas de Villa Dolores,
la Casa Esteve Font i
Germà y las Casas Joan Grau
i Punsoda.
Si se quiere profundizar
más en la arquitectura modernista de La Garriga, existen un total de
34 elementos catalogados de interés. Así mismo en la comarca del
Vallés Oriental
se encuentran algunas poblaciones como Cardedeu, l’Ametlla
del Vallès y Granollers, con un rico
patrimonio y bien conservado, con obras de Manuel Joaquín
Raspall y otros artistas de principios del siglo XX.
Si os gusta la época modernista o vais
a viajar a Barcelona, tenéis que descubrir el Palau del Baró de Quadras.