La ciudad de Belgrado
(Beli Grad, "la Ciudad Blanca") es la capital de la República
de Serbia desde el año 2006 y puerta de entrada a los Balcanes. Su
pasado está tristemente relacionado con guerras, invasiones,
protestas sangrientas y miles de muertos. Por aquí pasaron los
celtas en el siglo III a. C. fundando Singidunum, nombre que
también heredarían los romanos. Después vinieron los bizantinos en
el año 395, eslavos en el siglo VI bautizándola como Beograd,
y después vinieron los húngaros, los otomanos y los austriacos.
Tras 7 mil años de historia, podéis imaginar que todo, todo, no ha
desaparecido, a pesar de las guerras. Dicen que la mezcla de estilos,
épocas y artistas resulta un horror para los estudiantes de arte,
pero es un paraíso para los estudiantes de arquitectura. 80
bibliotecas, 52 parques, 50 festivales, 40 museos, 30 galerías y 20
teatros os esperan, para certificar que Belgrado es la ciudad que
nunca duerme. Lonely Planet incluyó esta ciudad en su
lista de “Top party places”, o lo que es lo mismo, uno de los
mejores lugares del mundo para ir de fiesta, ¿seguro que no os lo
hubierais imaginado?
Stari Grad
La
Ciudad Vieja de Belgrado se conoce con el nombre de Stari Grad.
Está ubicada en lo alto de una colina, mientras el Danubio
discurre sereno por sus márgenes, invitándonos a conocer el punto
justo donde confluye con el río Sava. Esa proximidad al Danubio, le
otorga un hermoso paisaje visible desde la vieja fortaleza
situada en el Parque Kalemegdan; una de las visitas imprescindibles
de la ciudad. Dicen que Belgrado es uno de esos lugares que producen
sensaciones, y que hay que olerla más que observarla. Quizás cenar
a bordo de un crucero o restaurante flotante (conocidos con el nombre
de splavovi) sea la forma ideal para introducirse en la
capital. De manera pausada, mientras se degusta una espléndida cena
¡y se exhala!, es el mejor momento para comenzar a tomarle el pulso
a la Ciudad Blanca.
Hram Svetog Save
Hram
Svetog Save es el Templo de San Sava; la Catedral de Belgrado,
el templo ortodoxo más grande del país y el quinto de Europa. Su
construcción se inició en el año 1935 y aún no ha terminado, le
falta parte de los mosaicos que adornarán el interior y que
prometen ser espectaculares. Está dedicada al fundador de la Iglesia
Ortodoxa Serbia y su primer obispo; el príncipe Rastko
Nemanjić (Свети Сава 1219-1233) convertido en
San Sava, sus restos mortales fueron quemados por Sinan
Pasha en el mismo lugar donde se levanta hoy el templo.
Museo Nikola Tesla
Dedicado
a la figura de este ingeniero-inventor que puso en bandeja los
generadores de corriente continua, y quizás también
la bombilla, a Thomas Alva Edison. Fue portada de la revista
Time en julio de 1931, ganador de varias medallas e inventor
indiscutible de algunas de las mejoras en el campo de la electricidad
y el magnetismo, que parecerían ciencia ficción en aquella época.
En el museo se puede comprobar la transmisión de energía eléctrica
sin cables de la que fui testigo, sosteniendo con las manos un
fluorescente que se encendía sin cables y se ponen en marcha varios motores para probar el funcionamiento de las máquinas diseñadas por Tesla.
Skadarlija
(Скадарлија)
Es
el barrio bohemio de la ciudad, desde finales del siglo XIX se
concentran un gran número de restaurantes, tabernas, terrazas y fue
un antiguo punto de reunión de artistas, poetas y escritores, hasta
tal punto, que hay quien lo bautizó como el Montmartre de
Belgrado. Lo mejor es recorrerlo cuando cae la tarde y dejarse
tentar por los aromas que salen de las cocinas y asadores de alguno
de sus locales rebosantes de animación serbia y música en vivo. Yo
estuve cenando en Dva Jelena (Dos Ciervos) un restaurante que
ya existía a principios del siglo XIX, donde sirven carne a la brasa y
se está codo con codo con los belgradenses. Algunos son capaces de levantarse a bailar alrededor de las mesas cuando suena la música.
Kuća
Cveća (Casa de las Flores)
Aquí
se encuentra la tumba del Mariscal Josip Broz Tito, más
conocido como Tito, líder de la antigua Yugoslavia. El
Mausoleo de Tito permaneció cerrado al público durante años,
aunque en la actualidad puede visitarse. Con una sencillez a la
altura de un líder socialista soviético, el espacio donde descansa
este jefe de Estado destaca por la luz del mármol blanco y el color
de las flores. En una sala se exponen los “testigos”
utilizados en las carreras anuales que se organizaban con motivo de
su aniversario y que eran entregados por jóvenes deportistas con un
mensaje de buenos deseos en su interior.
Kneza
Mihaila o Knez Mihailova (Улица кнез Михаилова)
Es
la calle peatonal más popular de Belgrado, aquí se puede encontrar
librerías, cafeterías, restaurantes y tiendas de moda, entre
edificios imperiales y tenderetes de recuerdos. En Knez Mihailova
5 se encuentra la Oficina de Turismo de Belgrado por si queréis
acudir a solicitar más información de la ciudad, y en la esquina
con Obilićev venac hay una tienda
llamada Katapult con productos
artesanales, bonitos regalos y objetos de segunda mano que bien
merece una visita. Desde aquí es posible acercarse hasta Trg
Republike; la Plaza de la
República donde se encuentra el Museo Nacional
y el Teatro Nacional.
Para
finalizar un día en Belgrado, nada como pasear por Трг Николе
Пашића; la Plaza de Nikola Pašić, donde se
encuentran el Parlamento (ubicado en el antiguo edificio de la
Asamblea Nacional), el Ayuntamiento y el Palacio
Presidencial que vale la pena ver iluminados cuando cae la noche.
Si vais a visitar la
capital Serbia quizás os interese un restaurante para comer en
Belgrado. Os recomiendo el restaurante Lorenzo & Kakalamba.
Mi hotel en Belgrado fue el Radisson Blu Old Mill Hotel
Este
post forma parte del Fam trip a Serbia gentileza de Glob Metropoliten Tours y Vueling. Esta compañía aérea tiene un vuelo directo Barcelona-Belgrado, aunque no opera todo el año. Durante la temporada de "invierno aeronáutico" (del 26 de octubre hasta el 31 de marzo) dejará de volar, aunque en Navidades tendrá vuelos disponibles el 19 y 26 de diciembre, así como el 2 de enero, para volver a operar en verano del 2016. Si
os interesa descubrir otros circuitos y viajes por el país, Viajar a Serbia os ofrece interesantes propuestas.