Cuando Natalia
Zapatero me invitó a Bilbao para contar por redes sociales lo
que sucedería en el evento de #Turistopia: “Los 7 pecados del turismo”,
no imaginé la cantidad de proyectos interesantes, productos únicos
y creatividad del que iba a ser partícipe.
Entre muchos de los
productos presentados estaba Broomx, una empresa ubicada en
Barcelona y que de la mano de la explicación de José Escribano
pudimos entrever, cual era la esencia del producto. Como profana en
la materia tecnológica, pero muy interesada en el turismo
experiencial, escuché con atención las insólitas propuestas
que en el Teatro Campos de Bilbao se estaban originando y que se vislumbraba
interesante.
La idea de que los
hoteles ya no sean sólo un lugar donde dormir, va tomando forma a
pasos agigantados. Sólo hay que pasearse por algunos de los últimos
espacios hoteleros en los que he tenido el placer de alojarme, para
saber que el huésped empieza a solicitar servicios extras y que una
política adecuada por parte de cualquier buen hotel, ayuda para
servir en bandeja toda clase de experiencias, actividades o añadir un plus: dejar un buen recuerdo en el cliente, ya sea para que
vuelva o para que hable bien de ese alojamiento.
Se trata de dejar huella,
ya sea por:
- Ofrecer un servicio exclusivo de spa, gastronomía selecta y decoración de lujo como en el Hotel Plaza Andorra.
- Vistas excepcionales de la ciudad, diseños originales salpicados de obras de arte, excelente terraza y copas como el que ofrece el Gran Hotel Domine Bilbao.
- Luz, aire, fuego y agua en perfecto estado para sentir estos elementos, a través de hermosos espacios en un lugar privilegiado de la Costa Vasca como el que ofrece el Hotel Arbe.
- O bien, lugares poco comunes para dormir como puede ser un faro, un iglú o una tienda de campaña en plena selva: 3 Lugares para dormir ¡extraordinarios!.
Los jardines de la
Hacienda San Jorge en la Isla de La Palma, el bar y los
conciertos en directo de Gastama en Lille, la cubertería de
plata del Hotel Carlton & Grand Canal de Venecia, las
clases de turco del Hotel Santa Sophia, dormir con lobos en
Parc Animalier des Pyrénées, el Badtunna y las cabañas de
madera de Camp Caribo,
el desayuno de productos locales y naturales de Les Béthunoises,
el Open Lobby del Hotel Occidental Bilbao que te hace sentir como en casa o la protección de las tortugas marinas de Pulau Selingaan,
son un ejemplo y una lista bastante abundante de hoteles que me han
ofrecido una experiencia inolvidable, pero Broomx va más allá
y quiere que esa experiencia esté controlada por el usuario. De
algún modo cada persona tiene en su memoria recuerdos inolvidables
de algunos hoteles, y de otros, han desaparecido casi
instantáneamente de la memoria y ya nada te los recuerda. ¿Qué
pasaría si el hotel donde te alojas te sorprendiera con un despertar
en la luna?
Lo que propone Broomx
es dotar a las habitaciones de hotel de experiencias tecnológicas
para sus huéspedes. Convertir el espacio en una nave espacial,
una canoa bajando vertiginosos rápidos, bucear en
aguas del Trópico o envolver la habitación en una frondosa selva.
Para ello, sonido, luces, imagen y movimiento se ponen manos a la
obra, para dotar de vida y realismo la vivencia seleccionada. De una forma sencilla y gracias a una aplicación móvil que puedes personalizar con tus
gustos y preferencias o dejarla para que te sorprenda, el cliente de ese hotel podrá confeccionar su propio perfil de
usuario y vivir desde un terremoto en un hotel de Japón hasta
un alunizaje en Barcelona.
Cabeceros de cama con
pantalla táctil, cajas de seguridad que se abren desde el
móvil, tener el pronóstico del tiempo o la guía turística de la
ciudad explicada en la pared, decidir correr las cortinas pulsando un
solo botón del teléfono o, simplemente moverlo para que se apaguen
las luces.
Si un hotel que disponga de la tecnología de Broomx y ofrece a sus clientes camas que
se mueven, mientras se proyecta la imagen de una pared que
se desmorona, no es suficiente para vivir una experiencia controlada
y desatar emociones, aquellos que lo deseen podrían disponer de unas
gafas de realidad aumentada para dotar al escenario, o mejor
dicho, a la escena tecnológica, de mayor “experiencia”. Los
campos de acción son infinitos: eventos, aniversarios, implantación
de marca, publicidad, turismo, etc... Quién sabe si pronto estaré
alojada en un hotel, donde pueda diseñar mi propia ruta de visita a
la ciudad, con las recomendaciones de viaje que tenga incluidas el
hotel, las sugerencias de la Oficina de Turismo y la lista de visitas
imprescindibles de otros bloggers de viaje.
José Escribano me
invitó a conocer la filosofía “You are the Room!” en su
Showroom de Poblenou en Barcelona, donde tienen una habitación 100%
Broomx. Allí Diego Serrano nos explicó el proyecto, nos
mostró la magia de un espacio con vida propia y jugamos un poco a
ser Dios, creando mundos fantásticos en las paredes. ¡Sed
bienvenidos a la era Broomx!
Más información:
Dirección: Calle Badajoz 88, 08005 Barcelona. Teléfono: 933
154 929. Web: Broomx.