Si ayer publicaba una
breve pincelada sobre el Palacio Nacional da Pena, hoy vamos a
sumergirnos en el encantador paisaje que lo rodea. El Parque da Pena queda cerrado por una gran muralla que acoge el misterio y la belleza
de un jardín de rara naturaleza. Su extensión alcanza 85 hectáreas
de jardines sembrados con las especies más exóticas y tropicales
que la Era de los Descubrimientos pudo ofrecer.
Sequoias, ginkgos,
helechos arbóreos, araucarias, robles y cedros, conforman el paisaje
de uno de los lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la
UNESCO en 1995. La vegetación predomina alrededor de fuentes, quioscos y
miradores que decoran el lugar junto con una antigua noria, una
capilla menor y un invernadero. Nada más entrar al Parque da Pena, a
mano derecha, nos encontramos con el Jardín de la Reina Doña
Amélia; una antigua huerta que ya existía en el siglo XVI y que
proveía al desaparecido Monasterio de Nossa Senhora da Pena de 1503
de verduras frescas. Tres siglos más tarde la Reina Doña Amélia lo
transformó en jardín exótico.
Adentrándonos por los
caminos desaparece la idea de jardín y va tomando forma el de bosque
encantado. En la zona conocida con el nombre de Feteira de la
Reina, destaca una hermosa colección de helechos arbóreos
provenientes de Australia y Nueva Zelanda. A menudo los helechos
alcanzan los 10 metros de altura y su presencia hace empequeñecer a
las dos mil especies diferentes de plantas que habitan en este
ambiente.
En el interior del Parque
da Pena la nota de color se encuentra en el Jardín de las
Camelias; un maravilloso jardín iniciado por la Reina Doña
María II (1819-1853) y que alberga una fantástica colección de
camelias originarias del sur del Japón. Del Sudeste Asiático nos
vamos a Oriente Medio y es que en el Parque da Pena las sorpresas no
acaban. En mitad de este singular parque, mitad jardín mitad bosque,
se alzan construcciones que mezclan los más insólitos estilos. La
Fuente de los Pajaritos es un pabellón de estilo islámico
cuya cúpula esférica conserva una inscripción en árabe. Los
azulejos que recubren las paredes, tanto en el exterior como en el
interior, son semejantes a los de la fachada principal del Palacio da
Pena.
Por último te recomiendo
llegar hasta la parte sureste del Parque da Pena, aquí se encuentra
el Valle de los Lagos. A este conjunto de 5 lagos confluyen
todos los senderos que recorren el parque, ¡por algo será!. Cisnes
blancos y cisnes negros nadan despreocupados entre pequeñas cascadas
y antiguos corrales de patos. Tal es la magia del lugar que con la
luz adecuada, alguien podría ver un pequeño Camelot y algún
unicornio bebiendo el elixir de la vida.
Más información:
Dirección: Estrada da Pena, 2710-405 Sintra. Tel.: +351 219
105 340. Horario: del 1 de mayo al 15 de septiembre de 9:30 a 19 h.
Del 16 de septiembre al 30 de abril; de 10 a 17 h. Entrada conjunta
al Parque y al Palacio da Pena: en verano 11 € y en invierno 8 €.
Transporte: autobús 434. Email: geral.pnp@parquesdesintra.pt. Web:
www.parquesdesintra.pt
No hay comentarios:
Publicar un comentario
En breve saldrá publicado tu comentario. Muchas gracias