Mostrando entradas con la etiqueta #bcnTB3anys. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta #bcnTB3anys. Mostrar todas las entradas

Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic

Interior de las Cavas Freixenet
La Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic ofrece una entretenida excursión por los viñedos y bodegas del Penedès; una de las regiones enoturísticas del país. Cataluña fabrica vino desde hace más de 2.000 años, en la actualidad cuenta con 11 D.O. (Denominación de Origen) de vino repartidas en 70.000 ha. de superficie vitivinícola: Penedès, Terra Alta, Cataluña, Tarragona, Conca de Barberá, Costers del Segre, Ampurdán, Montsant, Priorat, Alella y Pla de Bages. Catalunya produce 190 millones de botellas de vino y otras tantas de cava.

Toneles de madera en las Cavas Freixenet
El Penedès es la región catalana que cuenta con más superficie de cultivo de viñedos, además, cuenta con la D.O. Cava. La región del Penedès es donde se cultivan la mayoría de viñedos para la producción de cava, además de los viñedos para la elaboración de vino. 160 municipios con más de 350.000 ha. producen cava en Catalunya, siendo Sant Sadurní d'Anoia la capital del cava.

La Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic sale a las 8:30 de la Plaça Catalunya de Barcelona. La ruta te acerca a tres bodegas diferentes y te permite disfrutar del entorno y de dos catas de vinos y una cata de cava sin que la conducción sea un problema. ¡Si bebes, no conduzcas!

En el interior del autocar se exhiben un par de vídeos referentes al vino y al cava para que la mayoría de los extranjeros que realizan la excursión se vayan familiarizando con nuestra rica enología.

Visita guiada y cata de vinos en Jean Leon

Torrelavit
Entrada a la Bodega Jean Leon
Después de una hora de trayecto en autocar empieza la primera visita a la Bodega Jean Leon. Allí nos cuentan que la bodega fue fundada por Ángel Ceferino Carrión Madrazo; un empresario santanderino que hizo fortuna gracias a su Restaurante La Scala situado en Beverly Hills. Allí acudían los más prestigiosos artistas de Hollywood: Marilyn Monroe, Paul Newman, James Dean o Elizabeth Taylor se encontraban entre sus clientes. Dicen que la última cena de Marilyn Monroe fue un catering de La Scala.

Hollywood
Paul Newman, Marilyn Monroe o James Dean eran clientes del Restaurante de Jean Leon
La leyenda, el mito y el glamour parece que siempre acompañaron a Ceferino Carrión que adoptó el nombre de Jean Leon al nacionalizarse estadounidense. Cansado del pésimo vino que encontraba en Estados Unidos y que debía servir en su restaurante, decidió comprar en 1963, 150 hectáreas de viñedos en Torrelavit (Penedès) para poder fabricar su propio vino. Fue el primer viticultor que introdujo las variedades de Cabernet Sauvignon y Chardonnay en España ¡alabado sea!

Jean Leon
Jardín de viñas en la Bodega Jean Leon
En el interior de la Bodega Jean Leon puedes encontrar un pequeño museo, tras el que se sale a un jardín con las diferentes variedades de uva que hay plantadas en los viñedos y donde es posible contemplar uno de los coches antiguos de Jean Leon. La visita continúa por la Bodega y la cava donde reposan los toneles de madera, para finalmente acabar con una cata de tres vinos.

Vinos en venta
Vinos Jean Leon
La cata de vinos en la Bodega Jean Leon estuvo formada por una copa de Cabernet Sauvignon Reserva Vinya Le Havre (19 € la botella) y excepcionalmente por un Cabernet Sauvignon Gran Reserva Vinya La Scala 1996 (40 € la botella)

Una curiosidad: en el interior de la Bodega Jean Leon se guarda el Premio Gaudí de la Academia de cine catalán; una escultura de 6 metros de altura que acompaña cada año la Gala de los Premios Gaudí.

Más información: Bodega Jean Leon. Dirección: Château Leon s/n, 08775 Torrelavit (Barcelona). Teléfono: 93 899 55 12. Horario: de lunes a sábado de 9 a 17 h. Domingos y festivos de 9 a 13 h. Es necesario hacer reserva previa. Web: Bodega Jean Leon.

Visita guiada y maridaje en Bodegas Miguel Torres

Pacs del Penedès
Entrada a las Bodegas Torres
La segunda visita que realizamos en la Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic es a las Bodegas Miguel Torres. La familia Torres lleva en el mundo del vino la friolera cifra de 3 siglos y dicen que las empresas familiares son las que producen los mejores vinos. Las Bodegas Miguel Torres, en la actualidad, exporta sus vinos a 140 países del mundo. 

Bodegas Miguel Torres
Las rosas ayudan en el cultivo ecológico de las viñas de Bodegas Torres
El punto de salida de la ruta es un encantador espacio donde se encuentra el Centro de Visitantes, junto al edificio vemos las primeras vides junto a una hilera de rosales. Las rosas sirven de barrera de protección ecológica para algunas plagas, además de servir de detector si algo no va bien en el crecimiento de la uva. Desde allí sale un divertido tren turístico que recorre las distintas bodegas y almacenes de las Bodegas Miguel Torres. La extensión es grande y viene amenizada por el trayecto en tren y distintas proyecciones en el interior de las bodegas. 

Vino en bodega
Interior de las Bodegas Miguel Torres
La combinación es perfecta, diversión y conocimiento unidos para descubrir la emblemática Viña Mas la Plana; de donde salió en 1966 la primera cosecha de Cabernet Sauvignon (siempre hay rivalidades en ser el primero) y donde se sigue produciendo el vino Mas La Plana (61 € la botella). La Bodega Waltraud es el nuevo espacio de Bodegas Miguel Torres diseñado por el arquitecto Javier Barba, aquí los mejores vinos envejecen rodeados de oscuridad y silencio. 

Vehículo que recorre el complejo de Bodegas Miguel Torres
Sin bajarnos de nuestro particular vehículo, recorremos el Celler Margarita II donde cientos de barricas de madera atesoran los futuros vinos y el Almacén 3000, con lo que a mí me parecen kilómetros y kilómetros de botellas listas para ser enviadas a un país lejano.

Cata con queso
Maridaje de quesos y vinos en Bodegas Torres
El maridaje de quesos y vinos en Bodegas Miguel Torres fue excepcional. Nunca había saboreado quesos de distinto sabor con los vinos apropiados y me supo a gloria. Incluso aquellos quesos que normalmente no me gustan solos, los redescubrí gustosamente con la copa de vino seleccionada y adecuada. En total probamos 4 tipos de quesos y 4 tipos de vinos de Bodegas Miguel Torres (por orden): un blanco Viña Esmeralda 2015 (7.3 € la botella), un tinto ATRIUM Merlot 2014 (9.5 € la botella), un Cabernet Sauvignon Gran Coronas 2012 (13.5 € la botella), para finalizar con un delicioso Floralis Moscatel Oro (7.6 € la botella).

Más información: Bodegas Miguel Torres. Dirección: Finca El Maset s/n, 08796 Pacs del Penedès (Barcelona). Teléfono: 93 817 73 30. Horario: de lunes a sábado de 9 a 18 h. Domingos y festivos de 9 a 14 h. Es necesario hacer reserva previa. Precio del Tour con maridaje de 4 quesos y 4 vinos de forma individual: 19 €. Web: Bodegas Miguel Torres.

Visita guiada, aperitivo y cata de cavas en Freixenet

Sant Sadurní d'Anoia
Entrada a Cavas Freixenet
La Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic finaliza en las Cavas Freixenet; una empresa familiar de Sant Sadurní d'Anoia dedicada desde el año 1914 a elaborar cava y que se ha convertido en la mayor bodega de cava del mundo.

El exterior de Cavas Freixenet nos recuerda la época de sus inicios, coches antiguos frente a una fachada modernista nos dan paso para entrar en el mundo Freixenet. La guía nos muestra un pequeño museo que recoge en sus vitrinas la historia de Freixenet; sus botellas, los premios cosechados, incluso las famosas Burbujas Freixenet. 

explicación
Sala enosensorial en Cavas Freixenet
Varias salas enosensoriales explican que es el cava, las variedades de uva, la cosecha, la elaboración del cava y algunas curiosidades relacionadas con el mundo del cava como los tipos y nombres de los diferentes tamaños de botellas o el tipo de tierra donde se cultivan las viñas del cava Freixenet. Los espacios de exposición se suceden con la misma rapidez que las plantas bajo tierra: recorremos varias salas de barricas, salas de rimas y kilómetros y kilómetros de botellas. Unas son tan antiguas que ya no sirven para beberlas y presumen de polvo y antigüedad para decorar los pasillos sombríos y silenciosos de Freixenet. Otras botellas doradas, verdes y negras brillan con luz propia esperando ser transportadas hasta nuestras mesas.

Después de la visita a las cavas, nos espera un pequeño aperitivo de embutidos y queso con degustación de 2 cavas Freixenet: una copa de Cordón Negro Reserva (7.15 € la botella) y una copa de aromático Cava Brut Rosé (7.57 € la botella).

Más información: Cavas Freixenet. Dirección: Carrer Joan Sala 2, 08770 Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona). Teléfono: 93 891 70 96. Horario: de lunes a sábado de 9:30 a 16:30 h. Domingos y festivos de 10 a 13 h. Es necesario hacer reserva previa. Precio de la visita individualmente: 8.5 €. Web: Cavas Freixenet.

Más información: Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic. Precio de la ruta completa: 63.9 € (incluye transporte en autocar ida y vuelta a la Plaça Catalunya (Barcelona), las 3 visitas guiadas y las 3 degustaciones mencionadas anteriormente). Web: Ruta Wine & Cava del Catalunya Bus Turístic

Esta excursión fue ofrecida gratuitamente por Barcelona Molt Més, durante la celebración del tercer aniversario de la Asociación de Barcelona Travel Bloggers.

Turismo sostenible y responsable

El Prat
Cada pasajero contamina el aire con 100 kg de CO2 por hora de vuelo

Tras el fin del tercer aniversario de Barcelona Travel Bloggers y como llevo días arrastrando una nostalgia viajera (no preocupante, al menos de momento), me he puesto a releer mi post del año pasado sobre el #bcnTB2anys y creo que hemos crecido y “cambiado”, lo cual en teoría, nos hace ser más sabios.

El reto de este año planteado por la asociación es conseguir ser viajeros más responsables y sostenibles. Alguien como yo que eligió "planeta" para su nombre de blog, tiene muy claro dos cosas:
1- La importancia de las palabras: planeta, sostenible y responsable.
2- El hecho que para mí, conseguir ser un viajero sostenible y responsable es una misión imposible y una utopía. Voy a aclarar en voz alta mis pensamientos desordenados, balbuceantes y de protesta.

Aeropuerto de Mulu
Aeropuerto de Mulu (Borneo)

Desde que cojo un teléfono móvil (que no sé en qué circunstancias se han extraído sus componentes de la mina ubicada en África, pero seguro que son nefastas) para comprar un billete de avión, hasta que me subo a un aeroplano que contamina el aire que respiramos y aterrizo en una pista ganada, por la tala indiscriminada de árboles en la selva de Borneo, soy una viajera contaminante, explotadora de recursos, vidas y mil demonios más. Mea culpa, mea culpa... No empezamos para nada bien.

Algunos datos sobre mi “insostenibilidad”


He buscado algunos datos sobre nuestra “insostenibilidad”, sí querido, aquí vamos a pringar todos o es que ¿pensabas que tú lo hacías todo bien?. Eligiendo sólo lo dicho en el párrafo anterior y para no hacerme muy pesada, voy a desarrollar las consecuencias, impactos y “demases”:

coltán
Móviles manchados de sangre
  • La mayor reserva de “coltán” (elemento escaso de la naturaleza, pero que llevan todos los aparatos electrónicos en mayor o menor porcentaje) se encuentra en la República Democrática del Congo. Los conflictos derivados de su comercio, explotación y contrabando superan ya los 6 millones de muertos. Desde 1998 existe una guerra en el Congo por el control de las minas de coltán que nadie parece estar interesado en acabar mientras podamos seguir hablando por teléfono.
  • Cada pasajero de avión, repito, cada uno de los pasajeros que llena una aeronave, contamina el aire con 100 kilos de dióxido de carbono, por cada hora de duración de su vuelo. Tengo un programa que ha calculado el CO2 que llevo tirado a la atmósfera con mis vuelos y asciende a 53'4 toneladas de CO2 (equivale a tener 100 frigoríficos funcionando 50 años seguidos o lo que se emite en producir 232.000 botellas de cerveza).
  • La región de Kalimantan en Borneo, ha perdido un total de 123.941 km2 de bosques y selvas, la región de Sabah 22.865 km2, Sarawak 21.309 km2 y Brunei 378 km2, por el aumento de la producción de aceite de palma que en algunos caso es utilizado como combustible ecológico. Esta demencial y absurda realidad me viene al pelo para el siguiente planteamiento.
Economía Social
Compra en mercados locales

Es cierto que puedo ser un consumidor más exigente y que podría preguntarle al chico que ha estado sirviendo cerveza en vasos de plástico todo el día en nuestro aniversario, si su jornada laboral de más de 8 horas seguidas no es ilegal. También podría preguntarle si van a reciclar los vasos de plástico de Estrella Damm que hemos utilizado, pero seguramente el informarme no cambiaría nada, además de montar una revolución-pataleta con uno de los colaboradores de este evento que me auto-pondría tarjeta de falta. Escucho voces de que “quizás sería mejor que” cada uno exigiera, en su entorno, esa sostenibilidad y responsabilidad. Aquí me viene otro dilema.

Puedo hacer aún muchas cosas por salvar el planeta y ser un viajero más responsable y sostenible, lo sé, pero, y es un pero muy, muy grande, al final, todo no puede ser responsabilidad de los de siempre. Estoy muy cansada de ser la que lucha, defiende, exige, investiga y se rompe los cuernos para encontrar la manera de que mi economía no se resienta, si elijo aquel producto más sostenible, ecológico, social, etc...etc..

Alojamiento en la playa
No exijas hoteles en paraísos naturales

Los gobiernos, instituciones, asociaciones... también tienen que ayudar a salvar el planeta, a los animales y sus habitantes. Se permite producir objetos para llenar las tiendas de todo a 100 cuando son del todo inútiles y no sirven para nada. Se permite construir edificios y destrozar la naturaleza cuando seguimos teniendo viviendas vacías, para mí esto es un atentado a la razón, al planeta y a la palabra humanidad. Se señalan culpables, se identifican cazadores, se multa a empresas contaminantes y se sigue permitiendo que los ricos se vayan de safari para matar a diestro y siniestro todo aquello que se mueva en la sabana, simplemente porque pueden firmar un cheque con muchos ceros. Pero soy yo, la que tiene que tomar medidas. ¿Puede alguien facilitarme la tarea?.

Me gustaría no serlo, pero lo soy, soy un ser viviente contra natura. Como animales, llevo zapatos de piel, consumo productos que no sé quién los ha hecho, ni cuánto ha cobrado por hacerlo, la lista es enorme. No digo que no me importe, digo que no es posible controlarlo todo. Contamino y consumo recursos de un planeta que no merezco, porque no lo dejaré mejor que lo encontré, pero como pienso que hacer un poco, ya es hacer algo. Estas son algunas de las medidas que he reinterpretado con lo escuchado durante el aniversario de Barcelona Travel Bloggers.

Zapatero trabajando
En India puedes comprar babuchas directamente al zapatero

Medidas para ser un viajero sostenible

  • Dejar de consumir compulsivamente. Si tienes ropa, zapatos, bolsos, carteras, relojes ¡no te compres más! Tenemos un cuerpo solo, normalmente no podemos llevar más de una pieza de cada puesta. Las medidas de “consumir mejor” son las de consumir menos, aunque las consecuencias por cierre de tiendas, fábricas y personas sin trabajo nadie las contemple. Hay que cambiar muchas mentalidades, pero no precisamente la de los consumidores. ¿Se acabaron los regalos? Siendo viajero es bastante fácil dejar de consumir mientras se viaja. Aunque es terrible en cuanto a beber cerveza en una terraza, ahí el consumo no va a ir a la baja. Eso sí, mi mochila viajera tiene 9 años y aún le quedan 9 años más, por mí como si llega a los 90. No voy a decir la marca de la mochila porque la empresa ha optado hace tiempo, por reducir el personal de caja y ahora eres tú el que tienes que hacer el trabajo. En mi defensa diré que ya no compro en Decathlon por ese motivo (uix... se me ha escapado).
  • Los entendidos en la materia dicen que los consumidores optemos por productos ecológicos, que no degraden el medio ambiente, con envases biodegradables, etc... ¡cómo si fuera fácil identificar su ecología y sostenibilidad! ¿No sería mejor que el que firma, supervisa y regula ese producto para la comercialización se asegurara por mí? Pregunto ¿eh? Lo que yo llamo hacer bien su trabajo. Porque de envoltorios, envases que son más grandes que el producto que guardan en su interior, cajitas, bolsitas y bandejas de porexpan andamos bastante hartitos y dejar de comprarlos supone seguramente no encontrar sustituto ¡adiós mazapán de Navidad!. Lo mejor de viajar es que acabas comprando lo que necesitas en los mercados, sin demasiado envase de por medio. Pero eso no excluye la degradación del paisaje por donde pase mi coche, se haya instalado el alojamiento donde duermo, etc...etc... Si es que yo quiero, pero el mundo está contra mí ¿lo ves, no?
orangutanes
Centro de rehabilitación de orangutanes Sepilok (Borneo)
  • Puedo reducir, reutilizar, reciclar e intentar no contaminar en exceso o sin motivo. Reducir, reduzco, no veis que soy catalana, leñe. En cuanto a la reutilización y reciclaje lo mío roza el síndrome de diógenes, tranquilos esta asignatura está aprobada de calle. Por cierto, cuña-recordatorio: - Ajuntament de Rellinars, aún estoy esperando la compostadora que me dijisteis, me enviabais el 2 de abril del 2016.
  • Otra medida que se me ocurre para ser un viajero sostenible y responsable es que puedo pagar un precio justo por los productos que consumo en mis viajes y no regatear en exceso como si me fuera la vida en ello. También podríamos decirle al imbécil de turno que regatea para chulear al prójimo que su pasaporte queda requisado (aix.. que me pierdo). Volvamos a la economía social, piensa en beneficiar con tu paso por el mundo, al ser humano que tienes delante (cuando acabes de leer el post compártelo, leches). Muchas veces el consumo local hace milagros y ayuda a las familias a salir adelante (y a mí que me entren visitas).

Parque de Cabárceno
En Parque de Cabárceno se hacen ejercicios de vuelo con aves rapaces
  • No comprar animales, ni vivos, ni muertos. No comprar objetos fabricados con cuernos, carey, marfil, coral... Tengo una piel de reno comprada a una familia de Laponia Sueca que tenía su propio rebaño de renos y que matan para comer y vender su carne, los expertos dicen que esto es parte de la idea de economía social, ya que ayudas a familias a salir adelante con su único medio de subsistencia. Los rebaños de renos viven en libertad y por lo que vi no están maltratados, lo que no sé si comprar esta piel de reno me exime de culpa o me catapulta a las profundidades del inframundo.
  • En cuanto a los viajeros que van a ver santuarios, guarderías o el Parque de Cabárceno, también tengo una fuga de ideas y consejos para ellos. Los centros de acogida y protección de animales se distinguen, de los dedicados a salvar especies de los que son un negocio, por el respeto que procesan a los animales. Por ejemplo, si los animales salvajes están adormiscados en tus brazos, sospecha. Si las crías son separadas de sus madres para que tú te hagas la foto, sospecha. Si puedes dar de comer a los animales en cualquier momento y durante todo el horario de apertura del parque, sospecha. Si los monjes van con BMW, sospecha. El Parque de Cabárceno por lo que vi, respeta a los animales, aunque no soy una experta en el tema. Los horarios de comida y grupos que se acercan a los animales es de 1 turno diario y a la misma hora que lo hacen los cuidadores. ¿Inframundo 2?
  • Trekking por las montañas, si subes como una reina al Everest o si contratas una excursión que parece una expedición de Hiram Bingham en Machu Picchu, con porteadores al estilo película de Tarzán, sospecha y denuncia si ves que: los porteadores no van con calzado y ropa adecuada, sobre todo si las temperaturas del lugar son extremas. Por general una persona puede llevar a sus espaldas 1/5 o 1/6 parte de su peso corporal. Lo correcto es llevar entre 12 y 15 kg. de peso, y el límite suele estar en los 20 kilos. Si el porteador lleva más de ese peso, estás maltratando a un ser humano para que tú puedas hacerte una fotografía en el Kilimanjaro.

Recorrer en taxi Armenia ayuda a la economía local aunque contamina más que hacerlo en autobús

Quizás sea menos imposible de lo que parecía en un principio, pero hay un largo camino por recorrer. Si el punto de salida es #bcnTB3anys sabremos ver la ruta recorrida dentro de un año. Y si el evento sirve para que nos hagamos preguntas, cuestionemos y reivindiquemos por mejorar nuestro entorno, habrá valido la pena.

Los viajes más populares