Aunque no suelo publicar
este tipo de posts en Planeta Dunia, sé que para mucha gente
resultan de vital importancia saber de antemano con lo que se van a
encontrar. Desde el habitual ¿Cómo llegar del aeropuerto a Roma? pasando por los trucos, curiosidades y recomendaciones más extrañas
y rocambolescas que a un blogger se le ocurren publicar, como por
ejemplo:
Cuidado con la ropa en
verano
En
Roma y también en la Ciudad del Vaticano se requiere una norma para
vestir, que a la hora de visitar las iglesias es una reglamento
intransigente y que no dejan de tenerlo en cuenta y hacerlo respetar
a todos los visitantes. Tanto hombres y mujeres están obligados a
cubrirse hombros y piernas y no pueden mostrarse. No está permitido
el uso de tirantes ni pantalones cortos, así que si no quieres
encontrarte llevando una túnica glamurosa utilizada y sudada por
desconocidos, lleva contigo un pañuelo con medidas suficientes para
cubrir los hombros y otro para cubrir las piernas hasta las rodillas.
Otra opción es vestir con manga corta y pantalones piratas, de esta
manera entraréis a todas partes.
Agua potable
Roma posee una enorme
cantidad de fuentes con agua “apta” para el consumo humano. El
agua parece bastante saludable (al menos no hubo durante el viaje
desarreglos intestinales), sale fresca y sin sabor a grifo. Hay más
de dos mil surtidores repartidos por la ciudad, algunos son
sarcófagos antiguos, exquisitas esculturas o antiguos bebederos de
animales. Puede ser un ahorro considerable en vuestro presupuesto
llevar una botella de plástico vacía desde casa y rellenarla
durante vuestro viaje. Las botellas pequeñas de agua se venden en
los principales monumentos y quioscos por 1 €.
Servizio e coperto
Roma no es la ciudad más
recomendable para hacer una ruta gastronómica si tu cartera anda con
presupuesto ajustado. La ruina de todo viajero que visita Italia es
el dinero dedicado a los ágapes. Si no quieres acabar comiendo a
todas horas pizza (en realidad es la opción más económica;
2 € la porción) aunque la dieta a base de pizza se puede volver
algo pesada, indigesta y poco aconsejable según avanzan los días.
Pizza a Taglio o Pizza al pezzo (pizza al corte) sí, pero
seamos comedidos o acabaremos odiando la pizza.
Encontraréis que los
restaurantes y bares publican sus precios en letra grande pero en
letra pequeña algunos indicarán que hay que pagar unas tasas por
"servizio e coperto". Este “impuesto
revolucionario”·puede suponer 9 € extra en cualquier factura por
comer en una mesa (aunque sea un simple café). Atención con este
extra de euros, leer y comprobar en las cartas y anuncios qué
incluye el precio y que no. Ese tentador plato de pasta por 6 € ¿es
el precio final? o ¿ese cappuccino anunciado en la vitrina por 2 €,
acabará costando en la mesa 4 €?. Puntualizar que no hace falta
que la mesa esté en una paradisíaca terraza de la Piazza Navona
para que se aplique este impuesto. Los españoles estamos
acostumbrados a pagar más por el servicio en terraza pero no por el
servicio en comedor. Mi consejo es que vigiléis la letra pequeña,
porque puede ¡llevar sorpresa!
Tasas turísticas
En muchas ciudades
italianas se cobra un impuesto turístico, Roma es una de ellas. El
alojamiento donde os hospedéis os cobrará 2 € por noche y persona
al finalizar la estancia. Todo sea por una Antigua Roma longeva y
libre ¡Salve Roma!
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